Salvador Estrada Rodríguez
María de la Luz Martín Carbajal
Rubén Molina Sánchez
salvador.estrada@gmail.com
Resumen
La colaboración tecnológica ha experimentado cambios de visión en los últimos años, antes se daba principalmente al interior de un país o de forma regional. Hoy, gracias a la globalización, empresas y otras organizaciones trabajan separadas por miles de kilómetros de distancia, involucrando diversas culturas, con problemas iguales o diferentes, pero con cuestionamientos distintos para buscar respuestas.
Un ejemplo de lo anterior es el Biocat en Cataluña (España), este biocluster integra con mentalidad abierta a científicos de diferentes países, además de observar el desarrollo y aplicación de I+D en la biotecnología del mundo. Sumado a esto, hay un trabajo metódico y bien planeado que ha posicionado al Biocat, como uno de los bioclusters de referencia a nivel internacional.
Localizado en Guadalajara, México, el Biocluster de Occidente, tiene la oportunidad de integrar el sector de la biotecnología jalisciense, para incrementar las capacidades científicas y tecnológicas de laboratorios de una de las regiones con mayor concentración de producción de medicamentos de México.
Similares planteamientos, diferentes culturas, el mismo reto, ofrecer nuevos productos a una sociedad demandante. La eficiencia para lograrlo, pasa por el trabajo inmerso en la diversidad cultural, la colaboración tecnológica y la forma de vivir la globalización.
Palabras clave: Bioclusters, colaboración tecnológica, globalización e I+D.