NECESIDAD DE UNA REVOLUCIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO
Horacio Mercado Vargas y Litzajaya Mercado Vargas
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Es una técnica empleada con distintos fines. En este rubro nos referiremos a la entrevista formal e informal. La charla que se mantiene al finalizar una clase, es una práctica de entrevista informal: no está preparada, no tiene un fin específico, no se ajusta a ningún molde; en cambio, tiene la riqueza de la espontaneidad, de la cercanía, de la posibilidad de abordar temas o problemas de forma directa, centrándose en aquellos asuntos de interés que preocupan, al tutor y tutorado. En este sentido su eficacia es visible, porque da respuesta a una inquietud concreta y no está revestida de los ropajes de lo formal.
El cuándo y el dónde aquí es accidental: el aula, el pasillo, el patio, la salida de clase, el receso de clase, el final de la jornada, entre otros; cualquier lugar, cualquier momento puede ser idóneo. Los temas que surgen suelen empezar por aspectos triviales: un examen, una nota, una clase, un profesor, etc., para pasar a otros de mayor profundidad personal o familiar.
Por su parte, la entrevista formal, no puede dejarse a la improvisación, debe desarrollarse con arreglo a unos criterios fijos ya unos mínimos controles de eficacia.
¿Debe entrevistarse el tutor con todos los tutorados? El tutor debe conocer a cada uno de los tutorados de su grupo y reconocer que la entrevista es una de las técnicas privilegiadas, aunque consume un tiempo importante. Desde un punto de vista organizativo podrá empezar por aquellos casos más problemáticos manteniendo, al mismo tiempo, charlas informales con el resto de los tutorados de forma que todos sientan que son valorados y tomados en cuenta.
De estas charlas surgirá la necesidad de nuevas entrevistas más extensas y profundas; en cualquier caso, es importante que haya hablado con todos de una forma u otra y que conozca de una manera personal a los alumnos en un periodo breve de tiempo.
De acuerdo a Grawitz, según el grado de libertad y el nivel de profundidad, las entrevistas pueden clasificarse como:
En profundidad, el entrevistador decide los campos a explorar durante la conversación.
Entrevista clínica (psicoanálisis, psicoterapia), existen pocas preguntas y es el entrevistador quien elige los cambios a explorar.
Entrevista de respuestas libres, donde el entrevistador posee una gran libertad de acción y una orientación flexible.
Entrevista centrada o focused interview, se trata de analizar una experiencia determinada y los efectos de diferentes estímulos.
Entrevista de preguntas abiertas: el entrevistado tiene total libertad en el modo manera de contestar las preguntas formuladas.
Entrevista de preguntas cerradas: el entrevistado tiene un cuestionario estandarizado a responder.
Se pone el énfasis sobre el hecho de obtener de alguien la información deseada. Los guiones para entrevista (es decir, listas de preguntas) cubren un abanico que va desde preguntas cerradas o estructuradas (por ejemplo, cuestionarios verbales), a preguntas semi-estructuradas (en las que hay espacio para alejarse de las preguntas preestablecidas), pasando por las de final abierto (que parecen más bien conversaciones dirigidas con preguntas no preestablecidas); se pueden utilizar grabaciones de audio o video- grabaciones. Esta técnica se complementa con el cuestionario, que el caso de la entrevista se denomina guión, y permite recoger información que puede ser investigada hasta en sus mínimos detalles, es una conversación personal con los miembros de una organización.
Existen entrevistas cuantitativas y cualitativas, cada una implica un guión distinto. Las entrevistas cuantitativas requieren un guión más estructurado.
5.2.2.- Características de la entrevista
1. Los elementos materiales son:
A). Lugar. Un sitio tranquilo, en donde el alumno se sienta cómodo, que favorezca que no se produzcan interrupciones. Éstas suelen percibirse como signos de falta de interés por parte del tutor. El lugar debe ser un espacio que invite a que la entrevista pueda desarrollarse con un mínimo de privacidad.
B). Tiempo. Cita seria v formal, incluso cuando el caso es urgente. Fijar tiempo de duración y que el entrevistado lo conozca para que pueda adaptarse a él. Si no se agota el tema o surgen nuevos, el tiempo puede alargarse o, mejor, fijar una cita posterior.
C). Objetivo. Toda entrevista debe tener un objetivo inicial conocido por el entrevistado, puede variar a la luz de los datos que vayan surgiendo en el curso de la misma. Es importante que, el tutor se trace previamente un esquema sobre los aspectos fundamentales que van a tratar en relación con dichos objetivos. En este sentido, la preparación previa de la e entrevista es imprescindible.
2. Los elementos personales son:
A). Entrevistado. Su actitud y reacciones dependen de su situación v características personales. Pueden parecer elementos perturbadores como desinterés, falta de sinceridad, reticencias, timidez, nerviosismo, entre otros, que generen un estado de ansiedad, y que pueden incluso impedir la relación interpersonal y la comunicación.
Una de las formas para enfrentar esta situación consiste en mostrar un sincero interés por la persona entrevistada, por sus cosas, haciéndole ver que no es indiferente para el entrevistador, sino una persona única e importante. El crear un ambiente amable y cordial para la entrevista, facilita la comunicación. También ayuda a sentirse relajados el tenerla preparada previamente, para abordar los temas de un modo natural.
Si la dificultad de comunicación persistiera)' fuera imposible seguir con la entrevista, ésta se cortará sin dramatismos, se recordarán los objetivos que se pretendían trabajar " se le hará ver que sigue siendo una persona valiosa para el entrevistador. Se puede terminar formulando algunas interrogantes sobre las que pueda reflexionar y mostrarse abierto para poder atenderle cuando lo solicite.
B). Entrevistador. Su situación personal condiciona el proceso, aquí es más grave porque su herramienta de trabajo es básicamente su propia personalidad.
Para que la entrevista pueda ser eficaz hay que cuidar mucho los aspectos previos (las observaciones, los datos, la preparación, entre otros aspectos). El interés personal por el tutorado, de sus vivencias y dificultades acercará afectivamente al entrevistador y entrevistado, a fin de poder abordar con naturalidad en los problemas que se van a tratar.
En la vida escolar hay muchos elementos que dan pie al tutor para iniciar una entrevista, desde las notas de una evaluación, las faltas reiteradas de asistencia, las observaciones realizadas por el profesorado, hasta cualquier incidente con otros compañeros o las mismas respuestas del cuestionario personal, pueden ser motivos valiosos para mantener un diálogo pausado que ayuden a generar confianza, a analizar los problemas y a buscar conjuntamente soluciones compromisos.
Todos estos instrumentos y la técnica son de apoyo, por lo que exigen un alto grado de confidencialidad v discreción, en virtud de la clase de información contenida en ellos. La falta de ética profesional lleva a que el tutorado de confíe o a que no responda de una forma espontánea v sincera. En estas tareas con los tutorados es posible que el tutor se sienta desbordado y que en ocasiones no llegue a empatizar con todos ellos.
Cabe aquí la posibilidad de que los profesores del grupo, asuman un reparto de la tutoría individual. Entre las ventajas que presenta esta modalidad se encuentra la de que el tutor comparte trabajo y responsabilidad, que los alumnos estarían individualmente más atendidos, y que el profesorado se hallaría más implicado en las tareas educativas. Esto tiene también inconvenientes, como la dificultad de la coordinación grupo-alumnos, el que no existan criterios de trabajo común entre el profesorado o el que no se dé un escrupuloso respeto al estilo de cada uno. Con todo, y sin tener que llegar a un reparto “equitativo”, está claro que los alumnos eligen, en la práctica a profesores para solicitar su ayuda. Esto debe ser respetado y aprobado por el propio tutor.27
En resumen, la técnica de la entrevista contiene los momentos siguientes:
Momento inicial. Su objetivo es crear un clima amistoso que disminuya la tensión natural " que favorezca la cooperación, así como establecer el encuadre de lo que va a tratarse.
Momento central. Se empezará recogiendo la mayor información sobre el tema, partiendo de los núcleos vivenciales del tutorado: situación personal, escolar, familiar, social, entre otros, tratando de empatizar en la medida de lo posible con la problemática del entrevistado. A medida que se avanza la entrevista, el tutor irá tratando de centrar el tema, favoreciendo el análisis, recogiendo y sintetizando lo expuesto para clarificar posibles caminos de solución. Esta búsqueda ha de realizarse conjuntamente con el tutorado. Hacer un resumen de lo tratado. Aclarar, si es preciso, algún punto incompleto y de alcanzar algún tipo de compromiso concreto que le permita modificar su actuación, así como justificar la razón de una futura entrevista.28
Es importante cuidar la conclusión de la entrevista, puesto que es en estos momentos cuando debe consolidarse lo logrado.