Arturo Mansilla Olivares

mansilla89@gmail.com

La idea de contar con un documento como el que se prologa, responde al hecho de que quienes hemos estado inmersos en la delicada función de seguridad pública, hemos podido observar que el acervo jurídico de la policía es muy limitado.

De ahí que consideramos que el presente innovador libro puede contribuir al espíri- tu de modernización de la cultura de los elementos del cuerpo de seguridad pública; servir tanto a los policías en activo como a los alumnos del Instituto Técnico de Formación Policial, que aspiran a prestar el servicio de seguridad pública a la ciu- dadanía, mismos que tienen una formación integral a los requerimientos de una sociedad cambiante.
Cabe destacar que por lo regular antes de que existiera un documento como este se presentaba una situación complicada, ya que la normatividad que rige a la policía del Distrito Federal está dispersa en ordenamientos tan desconocidos para los pro- pios profesionistas y aun más para los policías.
Igualmente es importante mencionar que la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal ha emprendido un ejercicio permanente de análisis y propuesta de acciones; ha concretado compromisos e institucionalizado actividades, como las que se mencionan a continuación:

La sistematización de la base de datos para la localización de individuos con antecedentes penales y el intercambio de información con dependencias locales y federales. Todo esto dentro del marco del Plan Nacional de Seguridad Pública, lo que permite la integración de árboles delincuenciales cuyo análisis deja ver con claridad la participación del delincuente puesto a disposición en otros ilícitos, lo que conlleva a abatir los índices de impunidad; La participación en la formulación de más de setenta convenios con los dieci- séis Órganos Políticos Administrativos de la ciudad de México, así como con diversas personas físicas y morales, públicas federales y locales, sociedades y asociaciones y organismos no gubernamentales que han permitido, entre otras:

-La contratación de despachos jurídicos a través de los Órganos Políticos Ad- ministrativos de la ciudad de México que aboguen y defiendan a los elementos de seguridad pública que en el cumplimiento de su deber se vean involucrados en la comisión de hechos ilícitos;
-La conformación de Unidades de Protección Ciudadana integradas cada una de ellas con cuatrocientos elementos egresados todos del Instituto Técnico de Formación Policial, quienes además de haber aprobado satisfactoriamente la totalidad de las materias que en dicho Instituto se les imparten como requisito previo a su graduación como policías, se les transmitió un alto sentido de res- ponsabilidad y vocación de servicio;
-La adquisición de nuevas patrullas y equipo, destacando las más de doscien- tas ochenta cámaras de vigilancia de alta definición y quince centinelas que se han colocado en diversos puntos estratégicos de la ciudad que permiten obser- var a través del Centro Computarizado de Control Vial y la Central de Mando del Centro Histórico la actividad diaria de los vecinos, habitantes y visitantes del Distrito Federal a efecto de combatir la criminalidad;

La puesta en operación de los cinemómetros o radares detectores de veloci- dad que colocados en horas y lugares estratégicos han permitido disminuir en un alto grado accidentes viales que, dicho sea de paso, son los que en comparación con los delitos intencionales (homicidios), arrojan más muertes violentas en la ciudad; El Programa del Alcoholímetro que conjuntamente con el cinemómetro ha per- mitido una reducción significativa en los hechos de tránsito protegiendo así no sólo a conductores que conducen en estado de ebriedad, sino también a terceros que por la irresponsabilidad de aquéllos, pueden resultar lesionados o muertos; El Operativo Visión que ejecutado por once patrullas con igual número de cá- maras con visión infrarroja con capacidad para detectar y fotografiar un mil placas vehiculares por hora, las compulsa con la base de datos de robo de vehículos a efecto de identificar vehículos con reporte de robo; y La colocación de cámaras de alta definición y transmisión en tiempo real en grúas y vehículos para la colocación de inmovilizadores (arañas), con la finalidad

de que se proporcionen elementos fehacientes sobre los motivos por los cuales son arrastrados o inmovilizados los vehículos, mejorando de esta manera la aten- ción a la ciudadanía.