David F. Camargo Hernández
3. La Corrupción
La corrupción se define como la acción o efecto de corromper, alterar y
trastocar la forma de alguna cosa, viciar, pervertir, sobornar o cohechar a
una persona o autoridad(1) .
La corrupción tienen asidero, en aquellos funcionarios públicos que se valen
de las necesidades de la comunidad, para utilizar su cargo como un
instrumento de manipulación y obtención de beneficios personales. La fama
que han tenido los funcionarios público es de ser personas poco productivas
y en algunas oportunidades de proceder deshonesto. Son como una ¨clase
aparte¨ que convive con el sector privado, pero que no ha podido homologarse
a éste.
El demorar deliberadamente un proceso o procedimiento es una práctica
corrupta, es tan sutil la manera en que se puede llevar a cabo y se cuenta
con coartadas que hacen ver lo ilegal como legal. Tal práctica continua
haciendo eco en aquellos funcionarios, que llegan a tener la certeza de que
jamás se comprobará su acción fraudulenta. Al existir la duda y la sospecha
de que alguien es corrupto, da pie para no creer en él y separarlo del cargo
que le permite realizar tales prácticas, reubicándolo en una área que se
podría denominar de bajo riesgo. Es decir que su trabajo no tenga contacto
directo con los usuarios.
Otra práctica inmoral de los funcionarios públicos, es la negligencia en el
cumplimiento del deber y de responsabilidad en todas las actuaciones. Se
presentan funcionarios de alto rango que han sido hallados culpables de
enriquecimiento ilícito. Otrora se jactaban de observar una conducta
incuestionable y se rasgaban las vestiduras enarbolando la bandera de la
honestidad. Lo contradictorio de su actitud es que han sugerido alternativas
tendientes a combatir la corrupción antes de ser puestos en evidencia. Es
interesante dejar a la memoria del lector identificar a los personajes de la
vida que han tenido tal comportamiento.
Dentro de éste orden de ideas: la corrupción es uno de los grandes flagelos
del presente siglo y genera desconfianza a la opinión pública en los
servidores del Estado. Los efectos negativos de la corrupción influyen en la
economía, específicamente en los gastos del gobierno (...) la moralización
de la administración pública es prioritaria. La corrupción es un problema
que alcanza altos niveles en comparación con países de similar desarrollo,
sin embargo, el país ha modificado ese comportamiento de resignación y
tolerancia en que se encontraba inmerso y muestra una actitud más decidida
para combatir la corrupción. Aunque el problema está lejos de desaparecer,
se puede controlar y reducir con políticas encaminadas a la moralización de
la función pública. Para ello es necesario crear una comisión que en un
mediano plazo avance en la lucha contra la corrupción; cuya función sea la
de investigar y denunciar las prácticas corruptas. Que cuente con la
tecnología adecuada para hacer seguimientos a los movimientos de fondos
financieros (...) el criterio de la aletoriedad para detectar actividades
corruptas las cuales suelen ser difíciles de detectar. LLevar un adecuado
seguimiento a aquellos funcionarios que por las características de su labor
son susceptibles a realizar prácticas corruptas. Finalmente, implementando
este tipo de metodología se podrá conducir al país por el sendero de la
moralización.
Analizado el anterior planteamiento cabe hacer la siguiente reflexión:¿ Será
que la corrupción es tan contagiosa y absorbente que mentes abiertas,
capaces de generar ideas como las anteriormente expuestas, sean tan
vulnerables hasta el punto de perder su propia reputación ? ¿No será acaso
que su influencia es tan grande y aletargante, como para tener la
tranquilidad de no sopesar por un instante la posibilidad de ser
descubierto? ¿ O será más bien que la sociedad colombiana está tan corrupta
que se dificulte más encontrar un honesto?. Sería interesante saber cuántos
casos de funcionarios que son investigados por corrupción han sido hallados
culpables y cuantos continúan en la impunidad. Como decía un emperador
romano al interrogar a sus súbditos, cuando regresó de la guerra: ¿Quién ha
dormido con mi esposa ?. Al no encontrar respuesta preguntó: ¿Quién no
estuvo con ella?.
3.1 ¿Que Causa la Corrupción?
Una de las causas, sino la más importante, es la ineficiencia; porque reduce
la calidad con que los funcionarios públicos ofrecen los servicios a la
comunidad. Otra son los bajos salarios que en los últimos años han perdido
su poder de compra. Se han generado cuellos de botella en las entidades del
Estado, porque los funcionarios tienen bajos salarios y los mecanismos para
imprimir movimiento hacia la cúspide son mínimos. Cuando se realizan
concursos de promoción, las vacantes son insuficientes. Tienen un nivel alto
de capacitación y especialización, lo que hace más denso y complicado el
ascenso. El sistema de carrera administrativa no siempre basa la promoción
por méritos, se vinculan funcionarios a altas posiciones sin concursar o en
concursos ¨disfrazados¨para vincular las cuotas burocráticas.
En un estudio coordinado por Fernando Cepeda Ulloa sobre las causas de la
corrupción se presenta una encuesta de opinión que arrojó los siguientes
resultados(2) :
El 37% de las personas encuestadas afirmó haber sobornado a un funcionario
público.
El 79% consideró que la modalidad del soborno ha sido creciente durante los
últimos diez años .
De un 20% a un 45% consideró que las entidades más corruptas son el tránsito y
transporte, la policía, impuestos y aduanas y el seguro social entre las más
importantes.
Un 78% de empresarios entrevistados consideró que el pago de sobornos agiliza
los trámites en la administración pública.
De las instituciones que más aportaron en la lucha contra la corrupción se
determinó que fueron la fiscalía y la procuraduría como las más destacadas.
Los factores culturales pueden tener una gran importancia a la hora de
determinar la medida en la que las decisiones y las relaciones económicas,
incluyendo aquellas que se establecen entre responsables públicos e
individuos privados, se ven afectados por vínculos personales. En algunas
sociedades, puede resultar difícil para los individuos resistirse a las
presiones provenientes de personas con quienes mantienen vínculos y que
aspiran por ello a recibir un trato preferente. Una vez que se empieza a
realizar una distinción basada en estos vínculos, es frecuente que aparezca
la corrupción(...) cuanto mayor es la presencia del sector público y más
personalizadas las relaciones entre los individuos, mayores oportunidades de
corrupción habrá(...) los individuos que comienzan sorteando las normas, van
encontrando progresivamente más sencillo, desde una perspectiva moral ó
práctica, quebrantarlas, mientras que otros que, en un ambiente diferente,
quizá no hubieran sucumbido a la corrupción, comenzarán a imitar a aquellos
que la practican(3) .
3.2. Corrupción y Economía
La corrupción es tratada por algunos economistas desde el punto de vista de la
eficiencia, como benéfica, por cuanto que la consideran importante en el
engranaje del aparato económico(4) . La han analizado en
un mercado de precios, oferentes y demandantes y parten del supuesto de la
existencia de una oferta infinita de actos corruptos de carácter privado
utilizada por los funcionarios públicos, persiguiendo un interés
particular.¨ Estas teorías la analizan en el contexto de la racionalidad
económica de uno de los protagonistas del acto corrupto, quien decide
sobornar un funcionario y en esta forma maximizar su eficiencia al incurrir
en él (5).
La corrupción de tipo fiscal afecta los ingresos del Estado, los gastos se
incrementan y el tesoro público se ve notablemente disminuido. La corrupción
es una variable macroeconómica porque afecta el equilibrio fiscal. Según el
análisis de Jaime Vasquez Caro, consultor del Banco Mundial, la corrupción
es deficitaria por cuanto que aumenta gastos o reduce impuestos. Plantea la
posibilidad de una contabilidad social de la corrupción, la cual no debe ser
ignorada; implícitamente la corrupción es inflacionaria.
La evasión en el pago de tributos al Estado es una práctica corrupta, que
limita las posibilidades de inversión pública. Quien desarrolla una
actividad en condiciones fraudulentas como por ejemplo la importación ilegal
de insumos para la producción, está desincentivando al empresario que cumple
con el pago de tributos. El hecho de no haber controles eficaces a las
actividades productivas, conduce a que quien inicie una de ellas busque
mecanismos para incumplir con sus obligaciones ó sencillamente las limite y
no reflejen una realidad. Por lo tanto, la corrupción incide en la
Producción Interna Bruta de un país .
Robert Klitgaard La corrupción es un fenómeno económico y llega al punto en
que los costos de combatirla sean iguales a los costos de corrupción .
Es necesario que los funcionarios públicos que ocupan las posiciones de mando
sean honestos, incorruptibles; de esa forma al corrupto se le acortan los
caminos. La corrupción es como una cadena invisible, que en oportunidades
requiere el concurso de varias personas, creándose una secta donde se
practica una especie de ¨honestidad¨ entre deshonestos. Se encubren y
protegen unos a otros. La clave está en romper esa cadena por la parte mas
débil, lo difícil es encontrar su vulnerabilidad. El infringir la ley debe
ser objeto de grandes castigos, de esta manera se controla la corrupción
incentivando y premiando a quien denuncie.
¨El ciudadano que sea escogido para desempeñar una función pública, debe
comprobar por medio de su comportamiento, que posee aquellas cualidades que
en él fueron supuestas para hacerle merecedor de tal investidura,
constituyéndose en un ejemplo constante de virtudes cívicas como medio, el
más propicio, para fincar un sólido concepto de responsabilidad y de
adhesión por parte del pueblo¨(6) .
La corrupción reduce el recaudo desequilibrando el sistema impositivo,
permitiendo ventajas competitivas de unos productores frente a otros,
impidiendo que actúen libremente las fuerzas del mercado.
El funcionario público que es corrupto pretende maximizar sus ingresos. ¨En
consecuencia, el monto de sus ingresos dependerá de las condiciones del
mercado y de su habilidad para encontrar el punto de máxima ganancia en la
curva de la demanda pública¨ (7).
3.3. Estatuto Anticorrupción
Contempla en su artículo 67 la creación de la Comisión Nacional para la
Moralización, como un organismo adscrito a la Presidencia de la República.
El artículo 71 contempla la creación de la Comisión Nacional Ciudadana, para
la lucha contra la corrupción, integrada por siete (7) comisionados.
El título III, Capítulo primero, trata sobre la calificación de las faltas,
clasificándolas de la siguiente manera:
Gravísimas. Las cuales son sancionadas con terminación del contrato de trabajo
ó de prestación de servicios personales, destitución, desvinculación,
remoción ó pérdida de investidura. Se incurre en dicha falta cuando:
1-Hay un indebido provecho patrimonial en el ejercicio de las funciones.
2-Por obstaculizar las investigaciones de la procuraduría o autoridad
administrativa.
3-Por obrar con negligencia en la investigación y sanción de las faltas
disciplinarias de los empleados de su dependencia.
4-Cuando obtenga para sí ó para otra persona incremento patrimonial.
5-Intención de destruir total o parcialmente un grupo étnico, social o
religioso.
6-Utilización del empleo para respaldar campañas políticas.
7-Poner los bienes del Estado al servicio de causas y movimientos políticos.
8-Abandono injustificado del cargo.
9-Publicación o utilización indebida de secretos oficiales.
10-Actuar a sabiendas de estar incurso en causales de incompatibilidad,
inhabilidad, impedimento o conflicto de intereses.
Las Faltas Graves. Se sancionarán con multas entre once (11) y noventa (90)
días del salario devengado al tiempo de cometerlas, suspensión en el cargo
hasta por el mismo término o suspensión del contrato de trabajo o de
prestación hasta por tres (3) meses.
Las Faltas Leves. Dan lugar a la aplicación de las sanciones de amonestación
escrita, con anotación en la hoja de vida o multa hasta diez (10) días del
salario devengado en el momento de cometer la falta, con la correspondiente
indexación.
En el artículo 126 de la Constitución, está consagrado que los servidores
públicos no podrán nombrar como empleados a personas con las cuales tengan
parentesco hasta el cuarto grado de consanguinidad, segundo de afinidad,
primero civil, o con quien estén ligados por matrimonio o unión permanente.
Tampoco podrán designar a personas vinculadas por los mismos lazos con
servidores públicos competentes para intervenir en su designación. Sin
embargo este artículo parece no tener aplicación porque en algunas entidades
del Estado el nepotismo hace continua presencia.
La ausencia de responsabilidad en algunos funcionarios públicos, sumado al
poder y la autoridad sin límites hace que prevalezcan los intereses
particulares por encima de los intereses generales.
Siempre existirá un espacio que la normatividad no puede reglar: este espacio,
en el marco de la función pública, es aquél en el que el funcionario estatal
debe actuar interpretando las normas de acuerdo con los fines públicos
generales de la administración. Para ello tiene que tener una aproximación
ética hacia dicha concepción. Los fines y objetivos de la administración
pública son el referente esencial para determinar esa ética del funcionario
público(8) .
Algunos procrastinadores, por el hecho mismo de no realizar sus actividades en
forma oportuna, permiten que el Estado pierda recursos que podría obtener si
se realizaran las tareas en forma oportuna. Es el caso de la prescripción de
términos o de deudas que no tuvieron un tratamiento oportuno. Al someterse a
los funcionarios públicos a un escrutinio permanente, por parte de la
opinión pública, se fortalece el control por medio de la sanción moral.
El establecimiento de veedurías y el control patrimonial de los funcionarios
público, son algunas de las alternativas para combatir la corrupción. La
seguridad en las oficinas públicas evita que se incuben las prácticas
corruptas.
La corrupción debe denunciarse a tiempo para descubrir al infractor y
someterlo a las sanciones de ley, además del escarnio público; pero para
ello se requiere estar seguro y no caer en imprecisiones que debiliten la
posibilidad de desenmascarar al funcionario público corrrupto. El corrupto
por lo general tiene estrategias que le permiten escabullirce y salir
absuelto. Cuantos funcionarios que ocupan altas posiciones son tildados de
corruptos por la opinión pública, pero jamás son llevados al banquillo de
los acusados porque se carece de pruebas que demuestren su culpabilidad.
3.4. Tipologías de los Funcionarios Públicos Corruptos
Se pretende tipificar el comportamiento inmoral de los servidores públicos,
teniendo en cuenta su proceder de acuerdo con la psicología moderna. Se
trata de situaciones que por su naturaleza, le permiten a quien las practica
mantener su imagen de persona honesta y en oportunidades permanecer en el
anonimato. Son modalidades poco mencionadas por los estudiosos del tema .
¿Quienes son propensos a realizar prácticas corruptas?
Hay funcionarios que son mas propensos a la corrupción que otros, y esto
obedece posiblemente a su debilidad por obtener poder y riqueza. Aquellas
personas que ven en la vida un espacio para su propia realización no
conciben ni por un momento llevar a cabo prácticas corruptas, su mente esta
puesta en objetivos que van mas allá de acumulación de bienes o la
ostentación del poder, son individuos altruistas, tienen nobles ideales.
Hay quienes aunque desean obtener bienes materiales, aspiran a ellos en forma
moderada, desean vivir bien por su propio esfuerzo y mérito y buscan
alternativas honestas, se conforman con tener lo suficiente para asegurar un
futuro sin sobresaltos.
Los hay también que aunque desean riqueza, les mueve más el ansia de poder y
están dispuestos a sacrificarlo todo en aras de su cometido, su accionar
suele llegar a ser inmoral, porque no les interesa pisotear a quien se ponga
en su camino.
Los Soñadores
Individuo que no tiene los pies pegados a la tierra y que aspira a tener poder
y riqueza de una forma fácil y rápida, este tipo de personaje esta propenso
a ser corruptible, es manipulable y cede fácilmente a las propuestas
deshonestas que le representen beneficios económicos, llega a la vejez y
sigue avivando esa llama esperanzadora de salir de la pobreza de la noche a
la mañana. Algunos le apuestan al azar . De esta tipología se hablo en el
tercer capítulo.
EL Conformista
Agradece el trabajo que tiene, sus aspiraciones no van más allá de cumplir con
sus responsabilidades y sacar adelante su núcleo familiar, persona poco
propensa a la corrupción, cuando alguien decide animarlo para que realice
tales prácticas, se amilana, por momentos contempla la posibilidad pero al
final la descarta y prefiere seguir como está. Hay casos en donde es
confundido y convencido, pero en el momento de hacerlo se deja descubrir
fácilmente y termina lamentándose de su torpeza. De esta tipología también
se hablo anteriormente.
El Comediante
Es el funcionario cínico que sabe enredar perfectamente y utiliza las normas
para convencer de su inocencia. Emplea muy bien términos y cita artículos en
el momento apropiado, camufla su personalidad, se acomoda a las situaciones
que se presenten. Se hace el mártir y pregona su honestidad a los cuatro
vientos, dice ser persona integra y dedicada al ejercicio de sus funciones,
de ¨ comportamiento ético a toda prueba¨. Son personas astutas, con ciertos
dotes de oradores, de las cuales hay indicios de su falta de honestidad.
Tienen argumentos para justificar sus acciones en un ¨marco de legalidad¨.
Desafían a quien ó quienes los acusan y muestran protagonismo ante la
opinión pública. En esta categoría se pueden incluír a algunos políticos y
personas que tienen alta investidura en la estructura jerárquica del Estado.
Cuentan con respaldo de algunos grupos políticos y económicos.
Tratar de descubrirlos es bastante dificultoso. Su posición es elevada. El
tipo de delito que se les imputa es el de enriquecimiento ilícito, pero como
no está lo suficientemente argumentado y su culpabilidad no alcanza a ser
magnificada para apartarlo del cargo, entonces se crea incertidumbre en el
ambiente, permitiendo generar sentimientos encontrados en la población.
A este tipo de personajes si no se les llega a imponer sanciones de ninguna
índole, lo que resta esperar es que su conciencia sea su propio juez.
Son del tipo extrovertido ,expansivo que en oportunidades suele ser simpático,
de facultades intelectivas, seguro y sociable(9) .
El Todo Sí
Este tipo de funcionario se compromete con particulares directa o
indirectamente. No se niega a ningún tipo de acción dolosa, a todo le dice
que sí, solicita dinero por anticipado para cumplir su cometido. Se cuida de
no dejar huella de sus actuaciones, que no pasan de la receptación de
dinero. No lleva a cabo ninguna acción, bien sea porque no tiene acceso
directo a la información o aunque la tenga, no le interesa otra cosa que
explotar al incauto que confió en él para que le solucionara algún tipo de
problema. Cada vez que el interesado se acerca a conocer como va su caso, el
funcionario le solicita dinero arguyendo dificultades. Este tipo de
actuación se hace reiterativa, en cada entrevista que sostienen pide dinero
cuidándose de no hacerse notar. Al final no soluciona nada y como no hay
ningún indicio que lo comprometa, termina por abandonar la misión. Se trata
de funcionario de rango medio y bajo de la pirámide .
Si llega a ser acusado tiene la seguridad de no ser descubierto porque no hay
prueba alguna de sus actuaciones inmorales. Y por el contrario aduciendo su
¨honestidad¨, tilda de corrupto a quien se acercó a proponerle acciones
indebidas.
La forma de hacer evidente su actuación corrupta, es por medio de seguimientos
reiterativos, procurando encontrar un común denominador en su proceder. El
tenderle una coartada suele ser una posibilidad para desenmascararlo, sin
embargo, hay que ser cautelosos porque se trata de una persona habilidosa y
sagaz que a la menor sospecha se pondría alertar cambiando de actitud.
El delito que se le puede achacar al ser evidenciadas sus actuaciones
corruptas, es el cohecho, bien sea propio o impropio, también le es
imputable el delito de concusión .
Se trata de individuos extrovertidos, simpáticos de inteligencia intuitiva,
desconfiados.
El Mago
Es un procrastinador que no asume responsablemente las labores de su cargo.
Recibe documentos para que se efectúe el trámite respectivo. De su oportuna
actuación depende la prescripción de deudas, la recaudación oportuna de
recursos, la actualización de información. Su comportamiento es el de
recibir todo lo que se le entregue y acumularlo. Casi nunca da solución
oportuna a los problemas, tan solo vuelve a saber de ellos cuando ha pasado
mucho tiempo y se han generado conflictos que obligan el análisis
respectivo. Su actitud inmoral se presenta en el momento que evidencia por
cuenta propia y de manera accidental hechos que ocasionan traumatismos, y
aprovecha que nadie se ha percatado de su falta para proceder a desaparecer,
¨como por arte de magia¨, todo indicio que lo comprometa. Cuando se descubra
el problema, el seguimiento será muy dificultoso y probablemente el
funcionario no labore en la dependencia o la institución.
Este personaje, no dice no a nada, es despreocupado y distraído, extrovertido
expansivo y altamente sociable. Tiene un pobre concepto del trabajo.
El delito estaría tipificado como prevaricato por omisión.
El adecuado seguimiento a las labores de los servidores públicos, permite que
se reduzcan este tipo de acciones delictivos que atentan contra el buen
nombre de las instituciones.
El Relacionista Público
Es el funcionario que para obtener beneficios económicos, se hace amigo de
propietarios de empresarios, microempresas, pequeños comerciantes. Se
presenta como funcionario público exhibiendo el documento que lo identifique
como tal. Se gana su confianza, los ¨asesora¨ para que cumplan con sus
obligaciones frente al Estado procurando que se vean poco afectadas sus
finanzas . Al verse los resultados logra el aprecio de quien fue ayudado. Su
acción corrupta surte su efecto en el momento en que a cambio de su
colaboración, le dan obsequios, otorgan descuentos apreciables en la
adquisición de mercancías, tiquetes de viajes, alojamientos, préstamos,
invitaciones. Este tipo de actuaciones se presenta principalmente en
entidades de carácter técnico, donde agilizar un trámite es vital para quien
obtiene el beneficio. La gratitud es de tal magnitud que es incondicional la
retribución de los favores. En oportunidades se involucran con la familia de
quien fuese un perfecto desconocido. Son tratados con admiración y respeto.
Personas que posee un don de gentes y simpatía, extrovertido, expresivo,
alegre y hasta folklórico.
El delito que se puede tipificar para este caso, es el de tráfico de
influencias para obtener favor de servidor público. Porque el particular se
compromete a presentar al funcionario público a alguien de su confianza, que
requiera los servicios de éste, de lo cual todos obtienen algún beneficio.
Para el funcionario se ajustaría el delito de prevaricato por asesoramiento
ilegal.
Se puede descubrir en el momento en que alguien que decida seguirle el juego,
acumule pruebas que permitan ponerlo en evidencia. Sin embargo, es poco
probable que esto suceda, porque quien lo busca para pedir ayuda y la
consigue del funcionario tiene sentimientos de gratitud que se hace
extensivo y le permite al funcionario reputación de ser una excelente
persona. Si se le hace seguimiento es posible llegar a desenmascararlo.
El exterminador
La acción inmoral de este funcionario, es la de destruír los elementos de
trabajo que la institución adquiere para la realización de las actividades;
es un inconsciente que gasta en exceso papelería y deteriora ó destruye
máquinas, escritorios, sillas, cosedoras, calculadoras. Es prácticamente un
¨exterminador¨. En oportunidades se lleva los elementos de trabajo para la
casa. Se puede suponer que si realiza tal acción, también podría apropiarse
de elementos de mayor valor. Se ha visto en oportunidades que desaparecen
los elementos de trabajo y nadie se hace responsable.
Se trata de un ¨delincuente menor¨, que va de oficina en oficina sin que nadie
se percate de su presencia con la idea de apropiarse de algo. Sus acciones
suelen ser esporádicas y no dejan el menor asomo del culpable. Como se trata
por lo general de pérdidas de baja cuantía, no se hace investigación. Lo
cierto es que de vez en cuando se presenta pérdida de dinero que es extraído
de escritorios, bolsos, sacos, la pérdida de documentos, los cuales nunca
aparecen.
Es imprescindible que se tomen medidas de control en las oficinas públicas, se
expongan en lugar visible las sanciones en que incurren quienes llevan a
cabo tales actuaciones. Se espera que quien considere realizar alguna acción
ilícita lo piense dos veces.
3.5. Alternativas para Combatir la Corrupción
Expertos en el tema de la ética, proponen tres alternativas que permiten
combatir la corrupción en el sector público (10). La
primera sugiere, que debe haber un cambio en el comportamiento de la
comunidad que es tolerante con pequeños brotes de corrupción. En segundo
lugar, se deben adoptar medidas tendientes a mejorar los ingresos salariales
de los funcionarios públicos, el traslado de quienes ocupen cargos donde se
corra el riesgo de corrupción y la tercera hace referencia al tipo de
sanciones que se deben imponer a quien infringe las normas para evitar la
impunidad.
Los problemas éticos en que incurren los funcionarios públicos, pueden ser
pequeños y aparentemente insignificantes; como la ética hace referencia a la
conducta humana, se definen acciones buenas y malas y si alguna de ellas va
en contra de una normatividad impuesta en la sociedad, entonces su magnitud
no tiene importancia, lo que realmente interesa es si se ha transgredido una
norma para juzgar un comportamiento.
Es importante tener en cuenta que las conductas inmorales de los funcionarios
públicos, en oportunidades son inducidas por personas que persiguen
intereses particulares. No hay que olvidar que algunas acciones que aparecen
como inmorales, no necesariamente lo son. Es el caso de aquellos actos de
ayuda desinteresada y espontánea, que realizan funcionarios que tienen como
objetivo servir a la comunidad y que son vistos con los ojos inquisidores de
quienes ven en toda actitud focos de corrupción.
Desde el punto de vista psicológico, cuando un comportamiento inmoral es
tolerado por la comunidad, los funcionarios que explotan al Estado se
sienten motivadas a seguir ¨depredando¨ y defraudando, porque ven el camino
llano para hacer de las suyas. Se consideran lo suficientemente sagaces para
no dejar huella de sus actos.
Solamente hablamos de valor moral o de bondad moral, al referirnos a una
persona. Pero podemos preguntarnos ahora: ¿ Se podrá llamar moral a
cualquier acción que realice un hombre?. Se puede responder no; que solo se
puede llamar acción moral (buena o mala) a la acción que se realice
libremente (...) el hombre no sólo representa en su interior la obra o la
actividad, sino que tiende hacia ella por medio de su voluntad (...) el acto
verdaderamente humano siempre está motivado, tiene una finalidad (...) lo
característico del acto humano inteligente es que el acto pretende algún
fin, tiene algún motivo(11) .
La ética como ciencia de la conducta, propone fines que son válidos a las
personas dentro de una sociedad. El pretender separar la moralidad de la
normatividad, genera formas de corrupción. Decía León XIII que ¨La cobardía
y la duda son contrarias a la salvación del individuo y a la seguridad del
bien común¨. Es por ello que se hace necesario denunciar al corrupto y a
todo tipo de acción que parezca serlo. El guardar silencio es hacerse
partícipe de conductas inmorales .
Es imprescindible educar a los funcionarios públicos y a la ciudadanía en
materia de ética. Deben recibir instrucción y adiestramiento de tal
naturaleza. Las entidades que utilizan programas deontológicos (de los
deberes) pueden ocuparse mas fácilmente de casos de inmoralidad. Se deben
implementar normas tendientes a explicar como y cuando se debe presentar una
denuncia, ante quien y de que manera debe efectuarse(12)
. Sin embargo, hay que tener cuidado con la implementación de normas, porque
en exceso permiten abonar terreno a la corrupción. Esta se incuba en donde
se carece de seguridad locativa y de vigilancia apropiada, permitiendo que
pruebas documentales sean fácil presa de vándalos, enviados por quienes
tienen intereses oscuros.